El sábado recien llegado de Andorra de la conquista de la Fontblanca y mientras desacía la mochila de la ascensión de la montaña, organizaba otra mochila para la ruta en bici por la zona de Forés del día siguiente. Para que luego digan que los hombres no podemos hacer dos cosas a la vez.
Ya en Forés 9 biciclistas estábamos preparados para la rutilla que ya hicimos en su día y que nos gustó tanto y lo pasamos tan bien que quisimos repetir.
Uno de los motivos de tan buenos recuerdos es el tener que cruzar varias veces el río que, a parte de la emoción del momento, la consiguiente espera y risas a ver si alguien se cae o se moja. Todo esto sin peligro, ya que hablamos de dos palmos de agua.
Hoy no había tanta agua como el último día pero eso no evitó el pasar un día fantástico con una ruta suave pero en la que había que pedalear tras las divertidas bajadas, ya que en consecuencia siempre después había una subida.
La ruta fácil y para todos los públicos. Tras un moderado desnivel de bajadas y subidas, hicimos 22 kilómetros de distancia que nos llevó la mañana del domingo y con tiempo para no tener que madrugar, desayunar tranquilamente en Conesa, comer de bocata en Forés y el llegar a casa pronto, cosa que en Els Perduts es muy raro. Es más, es la primera vez en cinco años. Pero ya tocaba y es que al final del todo aprenderemos a seguir el horario y no perdernos. Aunque aun y así seguiremos siendo "Els Perduts".
Ya en Forés 9 biciclistas estábamos preparados para la rutilla que ya hicimos en su día y que nos gustó tanto y lo pasamos tan bien que quisimos repetir.
Uno de los motivos de tan buenos recuerdos es el tener que cruzar varias veces el río que, a parte de la emoción del momento, la consiguiente espera y risas a ver si alguien se cae o se moja. Todo esto sin peligro, ya que hablamos de dos palmos de agua.
Hoy no había tanta agua como el último día pero eso no evitó el pasar un día fantástico con una ruta suave pero en la que había que pedalear tras las divertidas bajadas, ya que en consecuencia siempre después había una subida.
La ruta fácil y para todos los públicos. Tras un moderado desnivel de bajadas y subidas, hicimos 22 kilómetros de distancia que nos llevó la mañana del domingo y con tiempo para no tener que madrugar, desayunar tranquilamente en Conesa, comer de bocata en Forés y el llegar a casa pronto, cosa que en Els Perduts es muy raro. Es más, es la primera vez en cinco años. Pero ya tocaba y es que al final del todo aprenderemos a seguir el horario y no perdernos. Aunque aun y así seguiremos siendo "Els Perduts".
EL GRUPO EN FORÉS PARA INICIAR LA RUTA.
PEDALEANDO JUNTO A LOS MOLINOS DE VIENTO CUALES QUIJOTES DE LA CONCA DE BARBERÁ.
IVAN Y ALBERT.
UN SERVIDOR TAMBIÉN.
SILVIA Y NOE.
RECUPERANDO LO QUE HOY HEMOS IDO TIRANDO POR LA RUTA.
LLEGANDO A CONESA.
ELS PERDUTS TRAS LA INVASIÓN Y CONQUISTA DE CONESA.
JOSE, UN TIO MUY SERIO.
UNOS EN EL BAR Y UN SEVIDOR VIGILANDO LAS BURRAS.
CANSADO TRAS LA FONTBLANCA PERO NO LO BASTANTE PARA NO SEGUIR CON LA MARCHA DEL FINDE.
REPONIENDO FUERZAS, HARÁN FALTA.
PABLO, ALBERT Y MOHA.
MOHA EN ACCIÓN.
ELS PERDUTS EN UN CRUCE... ¡PELIGRO!
¿SERÁ POR AQUÍ?
SÍ PORQUE LA ÚLTIMA VEZ QUE PASAMOS CRUZAMOS ESTE RÍO Y NOS REIMOS MUCHO COMO HOY.
HOY MENOS AGUA QUE EL ÚLTIMO DÍA QUE PASAMOS.
Y CADA UNO CON SU ESTILO.
PASANDO POR EL FONOLL PERO SIN QUITARNOS LA ROPA.
SUBIDAS SUAVES PERO CONTINUAS.
JUAN PERDUT EN FORÉS Y CON SUS MÁQUINAS ASESINAS.
ADEMÁS DE BUSCAR SIEMPRE UNA CIMA SEA DONDE SEA.
EL GRUPO LLEGANDO A FORÉS.
HOY HEMOS DISFRUTADO COMO NIÑOS.
¡CUA CUA CUA!
DECÍAN LOS PATOS.
AL FINAL Y POCO A POCO...
LLEGAMOS TODOS SANOS Y SALVOS.
FOTO DE FAMILIA.
HOY ERA DÍA DE PEDALEAR Y COMER...¡COMO NO!
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